[Reseña Manga] Imposiciones del destino

Tras la publicación de PSME, Mangaline trajo todo lo relacionado con esta obra (la secuela, "Envuelto por el resplandor de la luna" quedó inconclusa tras el cierre de la editorial con tan solo 2 tomos publicados en el mercado español), y una de esas obras complementarias fue el tomo único "Guuzen ga Nokosu Mono - Kioku Senmei II" o también conocido como Imposiciones del destino - La historia de Mikuro.

El tomo se compone de tres historias: La primera que da título al tomo y que se desarrolla dos años antes del final de PSME, la segunda "BIRTH - Recuerdos vivos" y la última "¡Vamos, Vamos, Enano-01!"

"Mikuro Yakushimaru fue abandonado por su propia madre al ser portador de poderes sobrenaturales. En busca de una nueva vida sin depender de sus poderes y para olvidarse del amor imposible que siente por su madre adoptiva, Mikuro decide irse de casa y vivir en Tokio. El día de la mudanza un chico desconocido pierde la memoria por culpa de Mikuro..."

Según los freetalks de la autora, si no se ha leído PSME antes, no se entiende del todo lo que ocurre en Imposiciones del destino. Mikuro aparece en PSME como un personaje que también tiene poderes sobrenatuarles como Rin, pero apenas conocemos mucho más de él. En este tomo terminamos de entender todo lo relacionado con sus madres y lo que más le atormenta.

Mikuro huye de la gente de EPIA (instituto de poderes sobrenaturales de USA) porqué quiere ser una persona normal sin tener que usar ni depender de sus poderes, pero a lo largo del de la historia se da cuenta que forman parte de él y tiene que aprender a aceptarlos.

Antes de La historia de Mikuro, Saki Hiwatari ya dibujó un tomo único en 1991 llamado "Kikoku Senmei" que precisamente trata de EPIA y de poderes sobrenaturales, así que para profundizar más en este instituto y sus personajes, habría que leer dicho tomo. Y no solo eso, si tenemos en cuenta que todo lo que cuenta la primera historia no termina, ya que la propia autora dice que quiere continuar desarrollando el personaje de Mikuro y su relación con Pamela y su madre, apaga y vámonos.

Y ahí está el mayor defecto del tomo, que lo que cuenta y nada es lo mismo, ya que te quedas casi igual que al principio. Esta bien que la autora recupere historias o personajes de obras antiguas (ya dice que Mikuro es uno de los primeros personajes que creó al ser estudiante) pero no de la forma en como lo ha hecho en este tomo, que no me ha convencido en absoluto.

 

Luego tenemos la segunda historia que está desarrollada en Shia, uno de los planetas que se mencionan en PSME. Esta historia si que es independiente a todo lo demás, y se entiende sin haber leído la antes mencionada. Una historia triste a la par que esperanzadora.

Ambas historias tienen un dibujo más actual, que poco o nada tiene que ver con el del final de PSME, y es una pena. No es del todo malo, pero es que ha cambiado por completo su estilo y hace unas caras y expresiones algo deformadas.

La tercera y última es muy antigua, de las primeras que dibujó Hiwatari y se nota por el dibujo tan ochentero que tiene. La historia se desarrolla en EPIA, y en ella salen dos personajes de La historia de Mikuro, pero en general no aporta nada al ser absurda y poco original.

La edición de Mangaline para este tomo, siguió la misma linea que la de PSME. Sobrecubiertas con papel mate, tinta metalizada e incluso usaron la misma tipografía tanto para el título del tomo como la interior de los globos. Eso si, el precio era algo superior, costaba 7€ por 190 páginas.

Solo recomendaría este tomo a la gente que quiera saber algo más de Mikuro o a los fans y coleccionistas de los trabajos de la autora.

Nota: 4